Una pardela en MADRID

He ido marcando con cruces de fuego el atlas blanco de tu cuerpo. Mi boca era una araña que cruzaba escondiéndose. En ti, detrás de ti, temerosa, sedienta. Historias que contarte a la orilla del crepúsculo, muñeca triste y dulce, para que no estuvieras triste. Un cisne, un árbol, algo lejano y alegre. El tiempo de las uvas, el tiempo maduro y frutal. Yo que viví en un puerto desde donde te amaba. La soledad cruzada de sueño y de silencio. Acorralado entre el mar y la tristeza. Callado, delirante, entre dos gondoleros inmóviles. Entre los labios y la voz, algo se va muriendo. Algo con alas de pájaro, algo de angustia y de olvido. Así como las redes no retienen el agua. Muñeca mia, apenas quedan gotas temblando. Sin embargo, algo canta entre estas palabras fugaces. Algo canta, algo sube hasta mi ávida boca. Oh poder celebrarte con todas las palabras de alegría. Cantar, arder, huir, como un campanario en las manos de un loco. Triste ternura mía, qué te haces de re...

GIGANTES MENTIRAS   Empequeñezco en un mundo de gigantes de sin alma. Sin alma, displicentes y molestos con manos manchadas de sangre y de fuego. Desquiciados avaros. Inmensos mentirosos. Nos compráis el alma con engaños. Mentiras cómplices con silencios justificadas. Crueles mentirosos vendidos al mejor postor. Seres vacíos de sentimiento traficantes del decoro. No tenéis solución, no tenéis perdón.  Acabareis cubiertos de la inmundicia que sembráis. Sois el mal necesario porque al final no podréis con nuestros sueños. Vosotros y vuestros acólitos lo único que tendréis será desprecios. Vanidosos ególatras, altaneros desquiciados manchados con la sangre y el sudor de vuestros hermanos. No tenéis solución…no tenéis perdón. No merecéis ni compasión…         Fdo: Nicanor Corredor

BREVE POEMA DE AMOR… Cada vez que me despierto Cada minuto que estoy sin ti Todo eso que siento es el amor para mí. Cuando regreso tarde y cuando me toca llorar Cada minuto en silencio  Cada hora que estoy lejos Y cuando siento que me acerco Cuando añoro tus palabras aunque sean duras y trabajadas. Como todos los días y aunque no lo diga nunca, tú eres AMOR lo único verdadero en mi vida. Mi único motivo y el último camino de partida… Juan Salvador Pérez Hernández.

TERNURA… Tu ternura es como un soplo de aire caliente en una noche fría Un vasto campo de azules en una noche gris, un sinfín de melodías encontradas al final del silencio. Tu ternura acaricia mi vida cerrándome todas las heridas. Soporto el ocaso de mi tiempo valorando tus caricias, acariciando tu pelo, hundido en el reflejo de tus ojos. Vuelo confundido con las gotas de tus lágrimas hundiéndome en tu alma Como el reflejo de la luz de la mañana, busco hacer malabares de sentimientos jugando en el circo de tus días. Tu ternura me resucita cada día, cada  segundo...en los que me muero por no poder estar a tu lado. Tu ternura hace que me eleve sobre un mar de dudas y siempre me pregunte si algún día estaré a tu altura…si no me rendiré en mis propias aventuras, si no me hundiré en mis propias dudas con tu ternura. Juan Salvador Pérez Hernández.